Consumo De Lácteos Y Desarrollo De Acné

El acné es una patología crónica inflamatoria de la piel que presenta elevada prevalencia en adolescentes y jóvenes adultos y un fuerte impacto psicosocial, pudiendo llevar a la disminución de la autoestima, ansiedad, rechazo social y hasta la ideación suicida (1,2).

Se caracteriza por el desarrollo recurrente o crónico en áreas de la piel con mayor densidad de folículos sebáceos como por ejemplo la cara, parte superior del tórax y el dorso (1,2).

La patogénesis del acné parece resultar de una interacción compleja de factores del hospedero como la estimulación androgénica de las glándulas sebáceas, reacciones inflamatorias o inmunes y disbiosis del microbioma, pudiendo ser influencia por la genética y posiblemente por la alimentación (1,2).

Existen diversos mitos nutricionales/alimentarios difundidos en la sociedad sin ningún fundamento científico sólido. Por tanto, es de gran importancia revisar la evidencia disponible sobre la relación entre el consumo de productos lácteos y el aparecimiento o agravamiento de lesiones de acné para discutir y esclarecer todas las dudas acerca del tema (3).


Revisando la evidencia disponible de varios estudios observacionales (4-10) en la revisión Acta Portuguesa de nutrição 25 (2021) podemos manifestar que se ha observado la relación del consumo de lácteos en la aparición del acné. La ingestión de lácteos estuvo asociada a un OR superior para el acné, comparándolo con los no consumidores (5,6,7,10). Esta asociación se atribuye particularmente a la leche, siendo más robusta la leche desnatada (4,6,8). En el estudio Kara et al (9) el consumo de queso fué superior en el grupo con acné (1434,05 ± 989,52 g) comparado al grupo control ((1039,24 ± 669,04 g) con significado estadístico p<0,05). Por el contrario, hay que confirmar que para los derivados lácteos (queso, yogur, kéfir, helado) la evidencia existente es aún más insuficiente que para la leche (4,7,9).


El papel de la alimentación en el acné es una preocupación frecuente y genera muchas dudas en la población (8).

Ha sido propuesto que la asociación leche-acné se pueda atribuir a la presencia de componentes hormonales naturales o de otras moléculas bioactivas en la leche (3). Otra hipótesis apunta para el aumento de los niveles de insulina como factor de crecimiento (IGF), secundarios a la ingestión de lácteos, puedan ser la causa de esta relación (2). Algunos autores teorizan que la proteína de suero de leche tenga un papel en la fisiopatología del acné (4). En esta secuencia, una explicación posible para la asociacción más significativa con la leche desnatada, puede ser justificado debido a su menor cantidad de grasa, provocar una menor saciedad, llevando a una mayor ingestión total de proteína de leche (4).

Basándome en la revisión Acta Portuguesa de Nutrição 25 (2021) es relevante destacar que los artículos analizados se basan en estudios observacionales y son de moderada calidad. La evidencia científica es limitada y se necesita esclarecer cuál es el papel de la alimentación en esta patología.


CONCLUSIÓN

De acuerdo con la evidencia actual disponible, parece existir una asociación entre el consumo de algunos lácteos, especialmente la leche desnatada y el desarrollo de acné. Esta relación parece ser más evidente para mayores frecuencias y cantidades de la leche (3).

A pesar de esto no es posible tomar una decisión, con elevado grado de confianza, de que exista una casualidad lácteos-acné o que la eliminación de leche llevaría a una mejora de las lesiones de acné o prevenir su aparecimiento.


BIBLIOGRAFÍA

  1. Figueiredo A, Massa A, Picoto A. Avaliação e Tratamento Do Doente Com Acne – Parte I: Epidemiologia, Etiopatogenia, Clínica, Classificação, Impacto Psicossocial, Mitos e Realidades, Diagnóstico Diferencial e Estudos Complementares. Rev Port Clin Geral. 2011; 27 (1):59-65.
  2. Thiboutot D, MD Zaenglein A, MD. Pathogenesis, clinical manifestations, and diagnosis of acne vulgaris. In: UpToDate [database on the Internet]. Oct 2020. Available from:http://www.uptodate.com
  3. Acta Portuguesa de Nutrição 25 (2021) 58-62 | Licença: cc-by-nc | http://dx.doi.org/10.21011/apn.2021.251. associação portuguesa de nutrição® | www.actaportuguesadenutricao.pt | actaportuguesadenutricao@apn.org.pt
  4. Zaenglein AL, Pathy AL, Schlosser BJ. Guidelines of care for the management of acne vulgaris. J Am Acad Dermatol. 2020 Jun; 82(6):1576.
  5. Juhl CR, Bergholdt HKM, Miller IM, Jemec GBE, Kanters JK, Ellervik C. Dairy Intake and Acne Vulgaris: A Systematic. Review and Meta-Analysis of 78,529 Children, Adolescents, and Young Adults. Nutrients. 2018; 10(8):1049.
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  8. Penso L, Touvier M, Deschasaux M, Szabo de Edelenyi F, Hercberg S, Ezzedine KSbidian E. Association Between Adult Acne and Dietary Behaviors Findings From the NutriNet-Santé Prospective Cohort Study. JAMA Dermatol. 2020; 156(8):854-862.
  9. Akpinar Kara Y, Ozdemir D. Evaluation of food consumption in patients with acne vulgaris and its relationship with acne severity. J Cosmet Dermatol. 2019; 00:1–5.
  10. Dreno B, Shourick J, Kerob D, Bouloc A, Taïeb C. The role of exposome in acne: results from an international patient survey. J Eur Acad Dermatol Venereol. 2020 May;34(5):1057-1064.